domingo, 27 de septiembre de 2015

Agua que no has de beber



"La cura para todo es siempre agua salada: el sudor, las lágrimas, el mar,…"

Una compañía suiza (Vestergaard Frandsen) ha diseñado un sencillo sistema para filtrar el agua contaminada y hacerla potable al instante.

El invento (LifeStraw) se presenta en dos formas: como un tubo que puede usarse individualmente a modo de pajita y como un depósito para uso familiar.
 Ambos sistemas se componen de filtros y cámaras que eliminan el 99,99% de bacterias y parásitos y el 98,5% de los virus.
La inmensa mayoría del agua que existe en la Tierra (el 97.5% del total) se encuentra en forma de agua salada. Tan sólo un 2.5% es agua dulce y no toda está disponible pues gran parte (un 70% de esa cantidad) es agua que permanece siempre helada, formando los casquetes polares y los glaciares. 

El resto, la disponible, se encuentra en ríos, arroyos y como agua subterránea.
Hay zonas del planeta en las que no hay acceso al agua potable. La Organización Mundial de la Salud calcula que, cada año, 3.4 millones de personas mueren de enfermedades relacionadas con el agua (cólera, malaria, fiebre tifoidea, esquistosomiasis,...).
Estos filtros están pensados para personas que viven en países en vías de desarrollo y para ser distribuidos durante situaciones de crisis humanitarias. Fueron utilizados durante el terremoto de Haití y las inundaciones de Pakistán y Tailandia
Esta es una noticia que suscita las lógicas suspicacias y críticas, pues estamos hablando de una empresa con ánimo de lucro que obtiene beneficios de una necesidad básica.
Sin entrar en este debate, el hecho es que la mayoría de estos potabilizadores son distribuidos por organizaciones, gubernamentales y no gubernamentales, de forma gratuita en los países en vías de desarrollo.
En el caso de los filtros individuales, a estas organizaciones les supone un coste de unos 3,5€/unidad. Su precio es de aproximadamente 30€ si se adquieren de forma particular.
Vestergaard Frandsen ha puesto en marcha una iniciativa por la cual, por cada compra de consumo de uno de sus productos, un niño en edad escolar de un país en desarrollo recibe agua sana durante todo el año.
Además, mantiene un proyecto denominado “Carbon for water”, que consiste en obtener créditos de carbono cuando las personas usan LifeStraw, al reducir la necesidad de quemar leña para potabilizar el agua hirviéndola. Venden los créditos de carbono que ganan reduciendo las emisiones del gas de efecto invernadero y generan así fondos que se reinvierten en el sostén del programa.
Así, han distribuido alrededor de 4 millones de potabilizadores a lo largo de una provincia en Kenia.

No se sabe con certeza cuál es el origen del agua en la Tierra.
Se cree que parte se formó en su interior, en el magma cargado de gases con vapor de agua que salió a la superficie a través de los volcanes, y que otra parte llegó del espacio exterior, a través de meteoritos transportadores de agua.
Lo que sí se sabe es que ya no tenemos más, no se genera agua nueva, la que hay es la única de la que disponemos en el planeta.
Esa cantidad de agua está inmersa en un constante ciclo cerrado vigente desde hace millones de años.
www.aguascordobesas.com.ar

Se evapora, se condensa, precipita y de nuevo se evapora.
Océano, nubes, lluvia, ríos, océano otra vez...
En el agua se originó la vida y en el agua comenzó la evolución.
Nuestro cuerpo está formado en su mayor parte por agua.
Las semillas no germinan sin agua.
Las reacciones químicas de las células precisan agua,...

No se puede decir que sea una mala noticia que algo así se haya inventado, pues permite a muchas personas mejorar su vida o, "simplemente", les permite vivir. Pero esto no es excusa para malgastar ni contaminar la poca agua de la que disponemos. No sólo es imprescindible para nosotros beberla, es que no existiría la vida sin ella. 


Fuentes: VestergaardO.M.S.

No hay comentarios :

Publicar un comentario